viernes, 30 de mayo de 2008

El trono de la reina

Este aparatejo-rascador-mueble-árbol-juguete se lo construyó Ricardo a Chida cuando ella recién llegó a la casa. Pero el aparatejo solo era un tronco para rascar hasta hace un par de meses, cuando se nos ocurrió hacerle la mejora tablita-con-peluche. Como son los gatos, apenas se le entregó la obra a la Chida no le gustó, lo ignoró y el pobre constructor quedó con la desilusión y la pena de hacer un trabajo para nada. Caso perdido fue forzarla a subirse. Finalmente, después de casi dos meses de ignorarlo la quisquillosa decidió que sí que el lugar sí era chido. Y nosotros felices.

1 comentario:

Anónimo dijo...

jajajjaja, tan bella!